miércoles, 17 de septiembre de 2008

OLLANTA HUMALA

«Yo era un buen ciudadano hasta que entré en política»
Una entrevista a Ollanta Humala por Abelardo Sánchez León y Martín Paredes

¿Cuál es hoy tu visión del Perú?

La de un país con muchas oportunidades por desarrollar. En el aspecto económico, el Perú es un país con recursos naturales y potencialidades envidiables en Latinoamérica y en el mundo. Tal vez en el aspecto social y político el Perú está viviendo un proceso de cambio, que significa la constitución de una nueva clase política con una nueva agenda y que lo que quiere es una democracia diferente de esta. Hay democracias para todos. Los que tienen el poder ahora señalan que los que quieren el cambio están atentando contra la democracia, pero es contra su democracia —no contra la democracia de la mayoría nacional—, que fue la que nos llevó al lugar donde estamos ahora y que también en parte llevó al APRA al lugar donde está ahora. La agenda política en los próximos años va a ser cómo solucionar esta ruptura de una sociedad que quiere democracia, pero que cada uno quiere que la democracia le solucione sus problemas.

¿Cómo refutarías el modelo neoliberal que se ha implementado en América Latina? ¿Cómo te opones a ese «sentido común» del modelo neoliberal?

En los veinte o veinticinco años que tiene de vigencia no ha sido la panacea ni ha traído las soluciones a los problemas fundamentales que planteó resolver en la década del noventa. En segundo lugar, no responde correctamente a una pregunta que tenemos que hacernos todos los peruanos: ¿Cómo se inserta el Perú en el proceso de globalización neoliberal que se vive en el mundo? Lo que plantea este modelo económico es que nos insertemos como un país exportador de materias prima, y eso es característico de sociedades neocoloniales. Nosotros creemos que se debe replantear el modelo económico para que permita al país insertarse primero en un bloque regional, insertarse en el proceso de globalización neoliberal como un país en vías de industrialización o con industrias nacionales sólidas. Esa es la forma correcta.

En América del Sur hay una polaridad: Hugo Chávez mueve una línea y Álvaro Uribe y Alan García mueven otra. Es obvio que tú te ubicas en la línea de Chávez. ¿Cuáles serían los pros y los contras de esa alineación?

Lo que pasa en Latinoamérica es que ha habido una crisis de los sistemas políticos en cuanto a representatividad. Estos sistemas representativos no están representando a las mayorías nacionales, y estas están pidiendo un cambio. Esto ha generado un proceso de rupturas. En Ecuador se han tumbado a tres presidentes, en Bolivia a dos, en Argentina a uno y en el Perú a Fujimori. ¿Qué es lo que sale de todo este proceso de rupturas en los sistemas políticos en Latinoamérica? Dos corrientes. Una que busca el cambio, que en Venezuela le llaman socialismo del siglo xxi, en Bolivia movimientos indigenistas y en el Perú, proyecto nacionalista. ¿Qué nos une a todos ellos? Que queremos construir un modelo económico alternativo diferente al neoliberal y un sistema político diferente al tradicional. Frente a eso, la otra corriente que nace es una más liberal que la tradicional, llamada neoliberal, que es producto del modelo económico norteamericano. América Latina va a ser un campo de reacomodo de una nueva generación de políticos que van a construir un modelo político, no de la noche a la mañana, pero vemos el Banco Regional, el ALBA —que en algunos estratos de la sociedad causa urticaria—, vemos que se está rescatando el concepto de la solidaridad y tomando el tema de la integración no solamente comercial sino por un aspecto de comercio más equitativo que el libre comercio.

El modelo neoliberal ha sido aplicado en el Perú por Fujimori, Toledo y Alan García. La mayoría de la gente considera que, a pesar de todo, está bien, que se crece gracias a ese modelo. ¿Tú crees que no?

Creo que no. Creo que la mayoría de la gente no está contenta con ese modelo. Lo que ha habido, desde la llegada de Fujimori, es un proceso de fujimorismo sin Fujimori. Toledo ha sido eso, lo mismo que Alan García. Nos han engañado diciendo que ha habido una transición a la democracia cuando no la ha habido. Normalmente, las transiciones a la democracia se estilan con procesos constituyentes, y estamos con la misma Constitución del fujimorismo, una Constitución hecha para aplicar un modelo económico transnacional. Con esta Constitución se aplica un modelo contractual con empresas que vienen a invertir al país, donde, por ejemplo, el costo de extracción del petróleo en Talara es de 12 a 14 dólares por barril y ese mismo barril se lo venden a Petroperú a 120 o 130 dólares, porque es un precio internacional. Ese modelo permite que, a pesar de que el Perú es productor de gas, el gas doméstico cueste más que en Chile, que es importador. La pregunta es: ¿Debemos continuar con un modelo económico que no está trayendo soluciones de fondo al país, que permite, sí, un crecimiento económico, pero que no se traduce en desarrollo? Yo creo que no. De qué vale crecer si ese crecimiento se convierte en crecimiento de enclaves de la economía nacional, como son las AFP, la banca, la minería. Cómo es posible que con todo este crecimiento económico hasta ahora Pisco permanezca en ruinas. La cuestión es cómo hacemos los peruanos para construir un modelo económico que priorice el desarrollo más que el crecimiento económico.

En los países que has mencionado hay conflictos internos. Venezuela tiene una oposición fuerte y Bolivia está en un proceso de autonomías. Tú das miedo en algunos sectores. ¿Un eventual triunfo tuyo en el 2011 traería una situación de conflictos, de polarización?

Nosotros no vamos a imitar ni a Venezuela ni a Bolivia. En eso hay que ser claros. La praxis nacionalista nos hace no copiar ni calcar, nos hace buscar la construcción de un Estado nacional, de un Estado multicultural que pueda incluir a todas las nacionalidades que hay en el país. Hemos planteado que no nos vamos a salir del Estado de derecho, porque no queremos polarizar más el país de lo que ya está. En Lima hay un apartheid invisible, donde los que defienden a los de abajo tienen que irse al cerro. No se puede hablar de un nacionalista que viva en un barrio mesocrático. Yo vengo de una familia mesocrática. De joven viajaba a Europa de vacaciones. Mi viaje de bodas fue al Caribe y Europa. Siento que esa gente que tiene esos prejuicios me ve como que he traicionado a una clase. Hay que romper esos prejuicios estúpidos propios de una colonia y no de una república. Nosotros vamos a hacer todo lo posible para llevar a cabo estos cambios, y que no sean traumáticos. Y una muestra de eso es que estamos cumpliendo las normas del sistema democrático. Hemos formalizado nuestro partido, tenemos una participación en el Congreso, tenemos alcaldías. Sin embargo, para esa gente que tiene miedo a un cambio seguimos siendo chavistas, antisistema o antidemócratas. Claro, si es la democracia de la que ellos se han beneficiado durante muchos años, entonces nosotros queremos construir otra democracia con un nuevo régimen económico y político, y con nuevos derechos fundamentales del ser humano.

¿Eres de izquierda o ese término ya no dice nada?

Cuando me plantean si soy de derecha o de izquierda, siempre digo que soy de abajo, porque esas son formas de ubicarte en el espacio electoral para después chancarte.
Me parece imposible que un país como el Perú pueda defenderse del proceso de globalización, al menos no apartado de los países andinos, de Sudamérica.
Justamente por eso nosotros establecemos una serie de relaciones internacionales con las corrientes de cambio en Latinoamérica: con Chávez en Venezuela, con Evo Morales en Bolivia, con Correa en Ecuador, con Kirchner en Argentina.
A Lula no lo has mencionado.
Bueno, lo menciono en todo caso. Él pertenece a esta corriente de cambios. Brasil está llamado a ser uno de los países líderes de Sudamérica.

En esta corriente de cambios, ¿cómo entra la ideología velasquista en el discurso político del Partido Nacionalista?

Es como preguntarse cómo mantener a Haya de la Torre ahora o a los que crean pensamientos a Mariátegui. Hay mucha gente que despotrica de Velasco pero que trabajó con él y ahora está en los sectores más conservadores de la sociedad. Hay una hipocresía intelectual que despotrica de Velasco. Velasco divide el siglo xx en antes y después de él. Su aporte es que trata de construir un Estado nacional. Obviamente, esto genera conflictos porque hay una vieja aristocracia latifundista, minera, que le hace una batalla campal. Estoy seguro de que todavía hoy hay gente que guarda sus bonos de la reforma agraria para ver en qué momento pueden canjearlos. Nosotros hablamos de nacionalización, pero no de una nacionalización con tanques y tropas que tomen las instalaciones de una empresa. Jamás hemos hablado de nacionalizar una empresa: hablamos de nacionalizar actividades estratégicas. Nacionalizar es darle un carácter nacional, poner al servicio de la nación una actividad sin necesidad de expropiar los activos de una empresa. Por ejemplo, en el transporte aerocomercial hablamos de fomentar la construcción de una empresa nacional con capitales privados, o privados y públicos nacionales, o donde pueda entrar, en minoría, inversión extranjera. De esta manera, queremos lograr que el Estado tenga presencia, a través del propio Estado, de sus empresarios nacionales, en la competencia aerocomercial, y lograr que Chile, con LAN, no se enseñoree de los cielos peruanos, que no ponga las tarifas que le da la gana. Eso es darle un carácter nacional. Velasco lo hizo con tropas, a su manera, en una época de dictaduras militares en Latinoamérica. Ahora estamos en el siglo xxi.
El presidente García quiere ganarle a Chile. Hay un sentimiento de revancha constantemente.
¿Qué piensas sobre eso?

Hay una fijación, no solo de Alan García sino de la clase política. Siempre miran en Chile un espejo. Esa fijación es una de las consecuencias de la Guerra con Chile. Como presidente electo, Alan García va a Chile y se compromete a no tocar el tema limítrofe y solo dedicarse a los temas económicos, o sea las cuerdas separadas. Y, por último, dice que tenemos que venderle gas a Chile porque si no Chile se molesta. Y lo hace en la víspera del día de la Batalla de Arica. García no tiene mejor forma de recordar ese acto que declarando eso. Es un cobarde. Eso me indigna. Y me indigna más porque yo vengo de ser soldado. Y en el tema del gas está tan extraviado de los grandes proyectos nacionales que lo único que se le ocurre hacer es venderlo.

En una eventual situación de desintegración en Bolivia, ¿qué papel crees que pueden cumplir Chile y el Perú?

Hay una lucha por el poder en los países donde se están produciendo cambios en el modelo económico y en el sistema político. Bolivia es un ejemplo de esto: ha replanteado la relación Estado-capital y ha logrado, en el gas, un plus de 1.300 millones de dólares que antes se lo llevaba Petrobras y las empresas gasíferas transnacionales. Eso trae consecuencias, por eso hay sectores que tratan de desestabilizar al gobierno de Evo Morales. La lectura de las autonomías y el referéndum revocatorio es que hay un reacomodo de las fuerzas políticas y económicas en Bolivia.
Simplificando, ¿cuál es tu modelo, Bolivia o Chile?
Eso es polarizar las cosas. El Perú debe tener su camino propio. Hay fuerzas interesadas en desmembrar Bolivia, en tumbarse a Evo por razones económicas o porque es un indígena. Lo que nosotros esperamos es que Evo Morales salga reivindicado y consolidado del proceso revocatorio. El problema que tienen que ver Bolivia, Perú y Ecuador es la viabilidad en el futuro. No sé si Bolivia puede ser viable con separatismos, o el Perú sin manejar sus recursos. Yo apuesto a la integración latinoamericana. Apuesto a la creación de un Estado que represente a Bolivia y al Perú, tomando como referente la Confederación Perú-Boliviana y que en el pasado Bolivia pertenecía al imperio incaico. Apuesto a la integración del Ecuador con el Perú y se terminan los conflictos con Ecuador. De esa manera sí podemos hacer viable Andinoamérica.
Ustedes obtuvieron 47% en la segunda vuelta de las elecciones del año 2006, pero después se han desinflado. La oposición no es muy clara. Alan García dice que no hay oposición. ¿Cómo evalúas a tu partido luego de las elecciones, mirando hacia el año 2011?
El sistema político en el Perú es perverso. Está hecho para darle todo al ganador. Cuestiono la legitimidad de Alan García en la presidencia de la república porque hubo una denuncia de fraude electoral, y la hizo Lourdes Flores. Lo que también tengo que cuestionar es la consecuencia de esa denuncia porque después [Lourdes Flores] aceptó, pero se entiende, porque después en el gobierno se han repartido el Estado. El sistema político es perverso porque nosotros somos la primera mayoría nacional, hemos ganado en primera vuelta, sin embargo en el Congreso somos minoría. Constitucionalmente, la oposición no tiene poder.
Su segundo vicepresidente en la plancha presidencial lo abandonó en el Congreso.
Ese es un traidor. ¿Qué puede hacer el partido? El partido ha sido estafado por ese sinvergüenza, que incluso antes de juramentar ya había renunciado. Este señor se pasea y se burla en el mundo de la política porque la mayoría en ese mundo son como él. Como decía Mao, la moral en el mundo no es más grande que un grano de arroz.
¿Estás contento con su bancada parlamentaria?
No es lo óptimo que hubiéramos esperado. Otro hubiera sido el escenario si hubiéramos mantenido los 45 congresistas iniciales; seríamos la primera mayoría en el Congreso. Pero estos traidores son los que dañan un proyecto político. Y el sistema no permite que los partidos puedan corregir esto. Si mantengo a mis 23 congresistas juntos y damos pelea en bloque, me siento bien y es un mérito.
¿Cuál es tu estrategia hacia el 2011? ¿En quién confías?
Hay que corregir los errores que se cometieron en la campaña pasada. Ahora hay más tiempo para la selección de gente. Tengan en cuenta que el tiempo que tuvimos fue muy corto para seleccionar a la gente más capaz, más idónea, sobre todo en valores morales. Yo venía de estar fuera del país más de dos años y jamás había sido político. Es más, cuando me pasan al retiro solicito mi reincorporación y el ministro de Defensa no lo hace. Ahí me planteo la idea de entrar en política porque, si no, estaría en el Ejército probablemente. Habrá que ver qué congresistas han hecho una buena labor. Hay que establecer una mejor relación con los medios de comunicación. Explicar mejor lo de Chávez, que fue un tema con el que se golpeó mucho mi campaña

Pero Chávez se metió en la campaña.

Evidentemente. Se metió en la campaña electoral y no me dio ningún rédito ni beneficio. Más bien benefició a Alan García. También es importante fortalecer áreas como los intelectuales, los equipos técnicos, y en eso reconozco el aporte de Gonzalo García que, junto con Félix Jiménez y otros líderes de opinión, nos permitieron poner en un plan de gobierno lo que estábamos diciendo en las plazas. Necesitamos trabajar más con los universitarios, falta una nueva reforma universitaria.
¿En qué se diferencia el discurso nacionalista de tu partido del etnocacerismo de tu hermano Antauro?
El etnocacerismo es un nacionalismo básico que solamente construye nación a partir del color de la piel. Ese es el nacionalismo básico que utilizan hasta las bestias, los animales. Si tienes una manada de toros negros y metes uno de color blanco, lo van a discriminar por el color. Nuestro nacionalismo es cultural y tiene un aspecto político, que plantea un nuevo sistema político, más participativo, más representativo, en donde tú puedes revocar desde el portero hasta el presidente de la república si entran por elección popular. Es un nacionalismo económico que plantea una nueva relación entre el Estado y el capital, donde el Estado participa en actividades estratégicas. Hablamos de un nacionalismo cultural que te integra no por tu color, sino por lo que piensas. Cuando veo en Machu Picchu hoteles de cinco estrellas, restaurantes de cinco tenedores, ellos no lo construyeron pero están lucrando de Machu Picchu. Y los descendientes de los que lo construyeron, las comunidades de los alrededores, viven vendiendo en la carretera chicharrones, choclo con queso, ponchos, mientras los otros que no lo construyeron y en muchos casos son chilenos que vienen a comprar tierras, ponen su buen hotel y lucran de lo que hicieron los peruanos. Ese es un ejemplo de lo que es una visión cultural del nacionalismo.
Estamos en una esquina de cuatro banderas. Al frente están la bandera de Francia, de la Unión Europea, del Perú y la del Tahuantinsuyo. ¿Hay dos banderas en el Perú? ¿Qué significa eso?
Que hay una puja de un Perú que sigue sin encontrar la independencia real, donde hay seis millones de peruanos que siguen en la extrema pobreza, que no son ciudadanos.
¿Y esa bandera los representa? ¿Va a reemplazar a la bandera blanca y roja?
Lo que digo es que existen esas lecturas porque el Perú es un país que no ha encontrado todavía su independencia, por eso hay corrientes que dicen «vamos con esta bandera» [del Tahuantinsuyo]. Hay una remembranza del imperio de los incas no porque sea un imperio, sino porque había respeto y un orden social. Es un Perú que lucha contra el centralismo virreinal.
Pero como soldado juraste por la bandera roja y blanca. ¿Harías lo mismo por la del Tahuantinsuyo, si fuera el caso?
El Estado multicultural debe tener una bandera y debe incluir a todas las nacionalidades que vengan con o sin banderas. Es verdad, yo he juramentado por la bandera rojiblanca que representa al Perú, y cuando lo hice fui consecuente porque la he defendido en las zonas de emergencia, en la Cordillera del Cóndor. A pesar de que me di cuenta de que el Estado y la clase política que manejaban esa bandera eran corruptos y de que ese Estado no representa a toda la nación, lo defendí. Pero no me siento orgulloso de haber defendido a este Estado perromuertero, como lo llamo yo, en las zonas de emergencia. Era mi deber.
¿Por qué no se siente satisfecho de haber defendido al Estado en las zonas de emergencia?
Porque creo que el Estado nunca estuvo ahí. Cuando llegabas a esas zonas tenías que ser no solamente jefe militar, sino cura, abogado, porque no había Estado. ¿Quién administraba la justicia allá? Por ejemplo, tienes un poblado que está a un día de camino de la base [militar]. Tú eres jefe militar y un señor viene a tu base a pedir justicia porque la vaca del vecino se ha metido a su huerto y se ha comido sus lechugas. ¿Vas a enviar una patrulla que vaya hasta allá, un día de camino, arriesgándose a una emboscada, y otro día de regreso, para llamarle la atención al señor que ha soltado a su vaca? Uno normalmente no lo hace porque no le compete, pero tampoco está el Estado que lo haga. El señor se va y tiene dos opciones: pedir justicia a Sendero Luminoso o regresar a la base y decirte: «Comandante, ese señor es terruco, en su casa hace reuniones y tiene armamento». El señor está mintiendo, pero ahí sí ya tú vas. El ciudadano no lo hace por malo sino porque necesita justicia.
¿Reconoce que el Ejército y las Fuerzas Armadas en general han cometido actos contra los derechos humanos en las zonas de emergencia?
Yo creo que sí, y es lamentable. Pero creo que no es toda la verdad. Ha habido excesos. Para nadie es feliz el tema de Putis, porque debe haber habido un exceso ahí.
¿Considera la masacre de Putis como un exceso? ¿Asesinar niños es ‘un exceso’?
Es un asesinato, no voy a mezquinar términos. Eso es execrable, condenable, repudiable y debe esclarecerse. No estoy justificando nada, pero hablemos también de toda la guerra. Tal vez el estudio más serio que ha habido de toda la guerra ha sido el de la Comisión de la Verdad. La CVR da un estimado de setenta mil muertos. La mayor parte son atribuidos a Sendero Luminoso y el Estado es responsable de veintiséis o veintiocho mil muertos. Al terminar la guerra, venció el Estado. A Abimael Guzmán y Polay Campos los tienes asumiendo su responsabilidad política y penal. ¿Quién asume el costo de la guerra por parte de los vencedores? ¿Dónde está el jefe supremo de las Fuerzas Armadas? ¿Quién está asumiendo el caso Cayara? ¿Cuántos presos hay? Hay un sargento. ¿Dónde están los políticos, los jefes militares? Por un lado están los cabecillas de Sendero Luminoso, del MRTA, pero por parte del Estado lo asumen los soldados, el personal subalterno y no los que dirigieron la guerra, los que elaboraron el manual de guerra contrasubversiva ME 41-7. Ese manual se creó en 1989, durante el gobierno de Alan García. Esa fue la Biblia que se llevaron doce mil oficiales a las zonas de emergencia.
¿También usó ese manual?
Me lo dieron, pero yo no lo usé. En ese manual se disponía la eliminación de los elementos no armados de Sendero Luminoso, la organización política administrativa. No lo usé porque nosotros fuimos un grupo de oficiales que quisimos cambiar la doctrina militar desde abajo y fuimos sancionados por eso. Desde el 86, en mi segundo año de oficial, me mandaron a una zona de emergencia. Veíamos impracticable la doctrina de guerra contrasubversiva que planteaba el Ejército, producto de la copia de manuales norteamericanos y franceses. En los cursos de las escuelas de armas planteamos una nueva doctrina cuestionando esa. A un grupo de oficiales que los descubren los detienen en el Servicio de Inteligencia, entre ellos a mi hermano, y a mí me confinan un mes al Hospital Militar, en el pabellón de tuberculosos. Pagamos el precio de haber cuestionado esa doctrina y no la aplicamos. No creo que todos hayan aplicado esa doctrina. Probablemente algunos lo hayan hecho, pero no me puedo sentir orgulloso de eso. El uso de seudónimos y la calificación que hace el Estado de Sendero Luminoso en ese manual deben ser analizados como elementos que provocaron un conflicto de esta naturaleza. Si pones en un manual la eliminación de los elementos no armados de Sendero, dispones el uso de seudónimos y los calificas de delincuentes terroristas y no como fuerza beligerante, ¿no es una incitación a la violencia? Y esto sucede porque Sendero Luminoso empieza la guerra con seudónimos.
En el Ejército también usaban seudónimos.
Por supuesto.
¿Cuál era su seudónimo?
Ya lo he dicho, Carlos, en Tingo María. El Estado debe también asumir su responsabilidad en este conflcto. Por el manual, por las órdenes que daba, por la forma de dirigir esta guerra. Saludo que Fujimori esté asumiendo las responsabilidades políticas de su gobierno. Deberían seguir los siguientes, porque no va a haber reconciliación si no hay verdad.
Hasta ahora no se han aclarado completamente las denuncias sobre su participación en violaciones de derechos humanos en en la base contrasubversiva de Madre Mía en 1992. ¿Si se comprobara su culpabilidad en tales hechos asumiría su responsabilidad?
Pero la estoy asumiendo. ¿Acaso me ves en Francia, en Japón? Estoy con la conciencia tranquila, yo no he cumplido ese manual y he hecho lo que he podido por defender a mi país. Esas campañas nacieron en la campaña política. Yo soy hombre público desde el 2000, cuando hago el levantamiento militar en Locumba. Nadie me denunció de nada. Mi cara salía en los periódicos y mi hermano estaba haciendo política. ¿Esas familias no podían denunciarme? Yo era un buen ciudadano hasta que entré en política. Peleé en las zonas de emergencia y en la guerra con el Ecuador, y soy un violador de derechos humanos, un narcotraficante, soy el peor ciudadano del Perú por haber pedido el cambio. Si digo que hay que defender a los de abajo, darles ciudadanía, soy un antisistema. No tengo ningún temor a eso y me quedo acá, afronto. Esto nace en diciembre del 2005, cuando empezaba a liderar las encuestas. Pero si miran quiénes me denuncian, esas mismas personas han denunciado también a otros oficiales.
Pero eso no lo hace menos responsable.
¿Responsable de qué? Yo no he hecho eso. Esto es parte de la campaña política.
¿Las organizaciones de derechos humanos estaban en combinación con los partidos políticos para denunciarlo?
No. Lo que digo es que esas personas están engañando a esa organización de derechos humanos, y espero que eso se aclare. Ya tengo dos años en este proceso y todavía no encuentran fundamentos para hacer una acusación fiscal. El tema es delicado porque es Ollanta Humala. Porque si fuera Juan Pérez ya estaría absuelto y archivado el caso. Al fiscal que archive eso por falta de pruebas se le van a venir encima las organizaciones de derechos humanos, la prensa que es contraria a la ideología nacionalista. El fiscal que archive eso tiene que ponerse bien los pantalones. No le tengo miedo a eso, ya estoy curado. Qué más me van a decir para el siguiente proceso, ¿que soy marciano? Eso sería algo nuevo, pero tengo mi partida de nacimiento, felizmente.


desco / Revista Quehacer Nro. 170 / Abr. – Jun. 2008


jueves, 11 de septiembre de 2008

Debates. La renovación del Congreso


Javier de Belaunde.R. de S.
Si queremos vigorizar el régimen democrático, es primordial elevar el nivel moral e intelectual de los parlamentarios. Nadie podrá discutir que hay representantes del pueblo que en mala hora fueron elegidos, porque un Congreso integrado por elementos poco ilustrados y de conducta deshonesta, no afianza un régimen democrático. Lejos de ello, prepara el terreno para un nuevo autoritarismo, y en eso tenemos amarga experiencia.
En la función pública es fundamental el imperio de la honradez y la capacidad, cualidades que son fundamentales para la vigencia de una democracia, porque la corrupción de los pueblos nace del mal ejemplo proporcionado por legisladores y gobernantes.
Muchas opiniones se han vertido para mejorar la calidad del Congreso. Una de ellas, la más frecuente, es restaurar el sistema de renovación de las Cámaras legislativas (en este caso es una sola) por tercios o por mitades. Este sistema se inicia con la república, ya que la Constitución de 1823, en su artículo 55 afirma lo siguiente: "se renovará el Congreso por mitades cada dos años, de modo que cada cuatro años lo sea totalmente". Coincide con la Constitución argentina (ver Juan González Calderón), en la que se reitera este sistema en la Constitución de 1928 para la Cámara de Diputados: "se renovará por mitades cada dos años, la suerte designará a los diputados que deben cesar en el primer bienio".
En el Perú, la Constitución de 1828 es muy importante porque los legisladores que intervienen en ella ya son políticos con sólida formación y experiencia. Con fundamento, el insigne jurista Manuel Vicente Villarán afirma que dicha Constitución es el primer experimento de una distribución bastante feliz de organización del Estado. El sistema allí establecido se repite en todas las constituciones hasta la de 1920, al establecer la renovación total de la representación parlamentaria. Es el sistema vigente en la actualidad, que tiene algunos inconvenientes porque se produce simultáneamente con la elección del Presidente de la República, de donde resulta que ambos poderes tienen el mismo origen, lo que –dada nuestra tradición presidencialista– puede dar lugar a una decisiva influencia del Poder Ejecutivo, rompiendo el equilibrio de poderes propio de un régimen democrático.
Una ventaja de la renovación parcial es que mantiene al Congreso en contacto con la opinión pública y las nuevas corrientes ideológicas, facilitando que lleguen a él otros planteamientos políticos. Un Congreso debe ser la voz de la opinión ciudadana. Cuando se divorcia de ella pierde prestigio y trascendencia en el desenvolvimiento de la política nacional.
El Congreso tiene, forzosamente, que vivir las inquietudes de sus electores, siendo sus principales funciones las de fiscalizar y legislar, promoviendo el desarrollo de las regiones. Sin embargo, vemos con tristeza como hay parlamentarios que se preocupan primero por sus intereses personales –como dijo hace poco alguno– y luego por los intereses de la Patria.
La otra ventaja de la renovación parcial es que al permanecer en la Cámara una parte de sus miembros, estos podrán orientar a los nuevos congresistas en la mecánica legislativa y en los proyectos en estudio y debate. Además, este sistema de renovación contribuye a que los partidos políticos que representan a un sector de la ciudadanía en el Congreso estén activos y tomen en cuenta la opinión ciudadana, de la que un parlamentario no puede desvincularse sin menoscabo de su participación en la vida nacional.
Con la renovación parcial se remedia el desastre de Congresos impopulares cuyos miembros no rinden cuentas a nadie y cuyas deficiencias éticas e intelectuales, muchas veces señaladas, no suelen ser corregidas. Recordamos aquí una frase certera de José Ortega y Gasset: "Del nivel moral e intelectual de los parlamentarios depende en última instancia la firmeza y el prestigio de una democracia". (Rectificación de la República, Madrid, 1931).
Dada la penosa experiencia de Congresos recientes, hay mayor fundamento para optar por el sistema de renovación parcial, que existe en otras naciones del continente. Los Estados Unidos, por ejemplo, tienen un Senado que va renovándose por tercios. En la Argentina, el Senado es elegido por seis años, renovándose por tercios cada dos. Es inocultable, además, que un aporte de sangre nueva es saludable al clima democrático; lo último pero no lo menor es que contribuiría a saldar la deuda ética que el Congreso tiene con el país.
Si queremos que se fortalezca la democracia, invoquemos a los congresistas a introducir las reformas necesarias que se traduzcan en una mejora del Poder Legislativo. El Congreso actual es una suma de minorías, pero es de esperar que la adopción del sistema de renovación parcial logre el consenso necesario para ser aprobado. Está de por medio el prestigio del Congreso.

Delito de opinión. ¿Quién es el antisistema?


Nicolás Lynch.
En los últimos tiempos, con motivo de las dificultades crecientes que tienen el gobierno aprista y sus aliados empresariales para llevar adelante la imposición neoliberal, sus voceros oficialistas y oficiosos atacan a todo aquel que discrepe de ellos como "antisistema". Es más, se rasgan las vestiduras por los resultados de las encuestas de opinión que los dejan mal parados y difunden el temor frente a la posibilidad de la victoria de un candidato "antisistema" en las elecciones del 2011. El cuco del antisistema se convierte así en moneda corriente para descalificar a todo aquel que no acepte sus dictados. Es bueno, por ello, preguntarnos ¿quién es el antisistema? Para ello tenemos que definir primero el "sistema" y después señalar, con propiedad el antisistema.
Los neoliberales y sus conversos apristas asumen como sistema el modelo político y económico de capitalismo salvaje actualmente vigente y pretenden endilgarnos la especie de que este constituye la normalidad democrática. Es más, se atreven a decirnos de que esta no solo es la normalidad peruana sino el consenso que existe para alcanzar la modernidad y el progreso en la región y en el mundo. La pregunta siguiente es entonces: ¿cuál es la normalidad democrática? A pesar y en contra de la transición del 2000 y el 2001, hoy vivimos con el modelo económico y la Constitución política impuestos por la dictadura de Fujimori y Montesinos. Es decir, vivimos en un régimen formalmente democrático pero impedido de desarrollarse por los parámetros heredados de una dictadura. ¿Podemos considerar esto normalidad democrática? De ninguna manera.
Contrario sensu la forma consecuente de llevar la transición iniciada con la caída del dictador a un puerto verdaderamente democrático es desechando la Constitución autoritaria y construyendo una economía al servicio de las mayorías y no solo del pequeño grupo de oligarcas y trasnacionales de turno. Este camino, por lo demás, no es nuevo. Es el camino señalado por la Constitución de 1979 que luego de otra dictadura buscó un acuerdo de paz entre los peruanos. Y es también, en cada caso con sus propias características, el camino que han tomado en la última década la mayor parte de países de América Latina. ¿Quiénes son entonces el antisistema? Aquellos que se afirman en la herencia autoritaria y neoliberal del fujimontesinismo y que hoy, desafortunadamente, dirigen económica y políticamente al Perú. En otras palabras, el antisistema está en Palacio.
La tarea de los demócratas no puede ser entonces apoyar este modelo sino combatirlo para crear las condiciones que permitan a la transición iniciada por Valentín Paniagua y actualmente congelada, desarrollar todo su potencial y crear una sociedad verdaderamente democrática. Afortunadamente tenemos ejemplos en el país, la región y el mundo, que nos señalan un camino distinto a la farsa que nos habita y nos deben permitir consolidar el sistema democrático en el Perú.

Este domingo a las 9 por fin HIldebranth de vuelta

El domingo estaré otra vez ante unas luces, frente a unas cámaras, en un estudio de TV.Será por Canal 11, que Ibope dice que es un canal siberiano de antena, todos los domingos a las 9 de la noche.Gélido o no, Canal 11 ha sido el que, al final, se ha atrevido a abrirme una puerta. Y esa valentía es algo que quienes esperan mi retorno deberán de reconocer.Se necesita ser valiente para contratarme. Y no se necesita ser brillante para imaginar la cantidad de presiones que están recibiendo (y recibirán, espero que a pie firme como hasta ahora) los directivos de RBC Televisión.“Colegas” verdeados por la envidia, autoridades temerosas, canallas de todas las raleas lanzan advertencias, anuncian tiempos peores, amenazan con un bloqueo de estilo cubano sobre la emisora que se ha atrevido a sacarme del exilio interior al que “el sistema” –el sistema de los humoristas vendidos y los vendidos que hacen de humoristas involuntarios- me había condenado.Alguien me dijo hace poco, con no poca fruición:-El “sistema” te ha sacado del medio. Y el “sistema” ha demostrado que se puede vivir sin ti.Me dio ganas de decirle a esa persona que no era para tanto. Que, en realidad, yo también había aprendido a vivir lo más lejos del sistema que me fuera posible.Tradúzcase “sistema” por tejido de intereses y carencia de escrúpulos y se entenderá mejor esa frase que quiso ser lapidaria.Y ahora no es que el “sistema” me haya recuperado. Es que un canal que a va contramano del “sistema” está decidido a desafinar y a ejercitar la libertad que los demás temen o despilfarran.En resumen, que todos los kuchinkis están sobresaltados. “Los destructores” del erario público están temerosos. El basural de la política está conmovido.A mí no me importa quiénes se ponen nerviosos. A mí lo único que me importa –como siempre- es no decepcionar.Mi compromiso, como toda la vida, es con el público que quiere salirse del desayuno escolar que ofrece la TV como ración diaria de política. Mi compromiso es con los que están hartos de tanta afonía en relación a los temas que de verdad importan.Y el programa se llama “El perro del hortelano” para mandarle, desde el saque, un mensaje al presidente de la República. Este no será un programa al que llame el señor Luis Nava –cuyos ancestros fueron, como se sabe, descubiertos por un entomólogo francés a orillas del Putumayo en 1846- ni el ilustrado señor Chirito, secretario y jefe de prensa de Su Excelencia, respectivamente.Modestamente, creemos que el verdadero enemigo del Perú no es el perro del hortelano que derogó a mordiscos la ley de la selva. El verdadero enemigo del Perú es la perra corrupción. Y la perra corrupción está volviendo a tener crías en este segundo alanismo del Señor.El programa tendrá opiniones pero no pretende ser, desde luego, una sucesión de indignaciones. Lo que contaremos a los televidentes de la TV abierta –abierta en canal por quienes la han amordazado- serán cosas que hayan sucedido, hechos comprobables y documentados, delitos menores y mayores siempre sostenidos en papeles.De modo que los que deberían de temernos son los cutreros. Y los que escriben desde la cutra. Y los que defienden a los cutreros. Y los que se han hecho ricos en la cutrería. Y los que le dicen a la pobrería que el destino de la patria los obsesiona cuando lo que los obsesiona es el cheque de la riquería.La democracia no consiste en votar cada cinco años. La libertad de prensa no consiste en ver cómo se roba mientras se habla de Karen Dejo. El periodismo no consiste en construir un imperio que le deba favores a casi todos los personajes importantes de la política y la economía. Tampoco consiste en hacer chicharrones porque así lo exige un empresario que come tacos y es dueño ilegal de dos canales de TV “peruanos”. El periodismo, desde siempre, fue una variante de la herejía, un discípulo de la insumisión, un amigo de la duda. El periodismo que vale la pena, quiero decir. Porque el otro pasará por Taboada. Este domingo a las 9 de la noche, en el supuesto frío polar del Canal 11, habrá una llamita a la que arrimarse. Los esperamos

blogger la legion virtual


Bloggers Tendencia. La legión virtual

Los blogs se han convertido en el vehículo más eficaz para democratizar la comunicación. Veinte mil peruanos tienen registrado uno en internet. Y allí cuelgan lo quieren. Toda clase de textos, audios e imágenes: la libertad de expresión en formato digital. Y allí también les responden no una sino miles de voces: un auténtico feedback. Solo en agosto, los blogs peruanos registraron veinte millones de visitas. ¡Un fenómeno! Conozca aquí a los bloggers más consultados de nuestra congestionada cholósfera.
Por: Fernando Obregón RossiFotos: Melissa Merino y Claudia Alva

La culpa es suya. Javier Albarracín, creador de Perublogs y Blogalaxia, dos de los portales con más blogs registrados en América Latina.

La blogósfera latinoamericana tiene en Javier Albarracín a uno de los grandes promotores en esta parte del continente. Es el creador de Perublogs y Blogalaxia, dos portales –para Perú y América Latina– que se han convertido en referentes internacionales. "Fuimos considerados por la Fundación Orange, en España, como uno de los integrantes del mapa de la Web 2.0 en español. (...) Saber que somos el directorio con más blogs registrados en muchos países de América Latina es una gran satisfacción", señala Albarracín.
"Perublogs nació primero. (...) Blogalaxia nació reactivamente. Una vez que el Perublogs tuvo éxito, nos escribían de varios países solicitando inscribirse en Perúblogs (...). Después nos dimos cuenta de que teníamos una gran oportunidad y Blogalaxia rápidamente se hizo conocido mundialmente", agrega. Albarracín además dirige Inventarte, una incubadora de negocios digitales y fue uno de los primeros peruanos en tener un blog en el año 2000.
Marco Sifuentes tiene dos blogs, ‘El útero de Marita’ y ‘Utero.tv’, es periodista de 29 años, se dedica a bloggear "24 horas al día, 7 días a la semana" y dice que cuando empezó "no tenía idea de todo el rollo del blog power". Hoy es uno de los bloggers peruanos más leídos y es citado por los medios de comunicación masivos.

Mate pastor. Ex ministro Juan Sheput. Política, polémica y análisis en formato digital.

"He conocido gente muy valiosa gracias a los blogs, personas que antes de este boom no hubieran encontrado un espacio en los medios y que ahora son parte de los múltiples debates de la cholósfera", señala Marco, para quien los medios de comunicación seguirán siendo indispensables. "De hecho mucha gente alucinada con el poder de los blogs profetiza que estos reemplazarán a los medios, pero, si te fijas, la mayoría de blogs se limitan a rebotar o comentar la información que aparece en los medios", dice.
LOS BLOGGERS Y LA POLÍTICA
Tanto políticos como periodistas políticos también tienen su blog. Juan Sheput, ex ministro de Trabajo en el gobierno de Alejandro Toledo, tiene el blog ‘Mate Pastor’, desde donde entra en diálogo directo con el ciudadano: "Entro en contacto con miles de personas a las cuales conozco tan solo por sus opiniones e ideas. El lector de blogs es una persona diferenciada", dice.
Según Sheput, "los blogs son una manifestación que tendrá un gran nivel de influencia en los próximos meses. El lector de blogs es un lector dedicado y que forma opinión. Es difícil establecer el nivel de influencia de un blog, pero lo hay".
Dos blogs con mucha información política son ‘Desde el tercer piso’, de José Alejandro Godoy, y ‘Pepitas.com’ del periodista Fernando Valencia.
"Son muchas las satisfacciones que me ha dado el blog –dice Valencia– pero una de las últimas es haber leído a César Hildebrandt expresando su respaldo al trabajo de los blogs. (...) Es gratificante comprobar que el periodismo ciudadano se abre paso y ya tiene DNI".

Pepitas.com. Periodista Fernando Valencia. Durante dos años mantuvo su identidad en reserva. Hoy su blog es un referente y él se anima a dejar la clandestinidad.

Para Valencia, ex editor de diarios como Liberación, Correo y La República, "hacer periodismo a través de un blog es un verdadero apostolado, pues te demanda tiempo y dedicación. Es como un hijo al que tienes que mantener y alimentar diariamente".
Para José Alejandro Godoy, la motivación de hacer un blog fue "de un lado, la necesidad de comunicar cosas y mis opiniones sobre la política y la actualidad peruana. De otro, hallar mi propio espacio de expresión, totalmente gratuito, en el que tuviera total libertad de decir lo que quisiera". Godoy se caracteriza por la acuciosidad en sus investigaciones. Bachiller en Derecho, actualmente estudia un posgrado en Periodismo Político.
EL MUNDO EN UN BLOG

Diario de iqt. Escritor y periodista Paco Bardales. Comunicación y cultura desde la selva.

La actividad bloguera permite conectarse rápidamente con el mundo, tal como sucede con Juan Arellano, quien no sólo escribe un blog con su nombre sino que además es editor hispano de Global Voices, una organización internacional que "recoge lo que dicen los bloggers de todo el mundo".
Arellano estuvo recientemente en un evento internacional de Global Voices, representando a los bloggers peruanos. "Ser parte de un proyecto de semejante envergadura me resulta particularmente grato y, sobre todo, motivador", señala.
Andrea Naranjo de Leclerq, peruana, investigadora y antropóloga, escribe y actualiza su blog ‘Luna Antagónica’. Ella piensa que "los blogs están ligados al desarrollo de internet y en este sentido están ligados a nuestra propia evolución sociocultural".
"Creo que los blogs son arma de doble filo: puedes hacer mucho ruido inservible y adictivo así como puedes convertir a los blogs en un buen medio de expresión y hasta en un modelo de negocio en base a la información y el conocimiento", dice.
"La habitación de Henry Spencer" es un canal de televisión instalado en la propia habitación de Luis Carlos Burneo, un comunicador de 26 años, cinéfilo "adicto al video como formato y como lenguaje", según dice.
Allí, desde hace año y medio ha puesto cerca de 700 entrevistas a personas diversas, incluyendo algunas de la talla de Mario Vargas Llosa. Burneo se dedica a su blog "casi todo el día, todos los días" y considera que el mismo le ha abierto puertas profesionalmente. "Es como una tarjeta de presentación. Alucinante", nos dice.
CULTURA Y BLOGS

Hola spencer. El videoblog de Luis Carlos Burneo ya es famoso.

Porta9 es referencia obligada en los blogs literarios. Según Francisco Ángeles, el blog "tiene tres particularidades principales: es colectivo (participamos en él alrededor de diez personas), produce contenidos propios, como si fuera un suplemento cultural, y tiene entrevistas en video", agrega. Además ha sido el primer blog literario en abrir espacios a escritores de todo el país, pues ha entrevistado a escritores de Trujillo, Chimbote y Cusco, y próximamente Arequipa.
Paco Bardales tiene el blog ‘Diario de IQT’, escritor y periodista, actualmente organiza la Semana del Libro de Iquitos y el próximo año producirá una película que dirigirá Alberto Fuguet en Iquitos, "El blog no es una herramienta para la destrucción de honras y adversarios, ni mucho menos un vehículo de figuración de gente osada pero poco talentosa y emocionalmente inestable", señala.
Agrega que el número de blogs "crecerá exponencialmente, pero al mismo tiempo crecerán las responsabilidades en su uso. Se convertirá definitivamente en una herramienta de consulta necesaria, analítica y muy poderosa, que hará que los medios de comunicación que usan los formatos tradicionales deban definitivamente adecuarse a los nuevos tiempos".
La poeta, periodista y catedrática Sonia Luz Carrillo, quien escribe en el blog ‘Habla Sonia Luz’, señala que "el futuro de los blogs es una incógnita. Tal vez empiecen a parecerse tanto unos a otros (fenómeno que ya empiezo a observar) y decaiga el interés en esta forma de comunicación".
Y observa: "También puede pasar que el poder político intente obstaculizar su enorme potencial liberador y/o que "el mercado" empiece a desfigurar masivamente su rostro lozano imponiendo sus criterios".
Esperemos que no
¿BLOGÓSFERA O CHOLÓSFERA?


Un personaje singular en la blogósfera local es ‘Chuto’, quien tiene un blog llamado ‘Choledad privada’ y en el que se habla "de la choledad que nos privamos, de la identidad que dejamos de construir por absurdas ideas estereotipadas, sobre quién es y cómo es un peruano".
Detrás del proyecto ‘Choledad privada’ –un proyecto renovador en la blogósfera– existe un equipo de jóvenes que prefieren mantener el perfil bajo amparados en el seudónimo para seguir ahondando en "los milenarios prejuicios y traumas que en ‘Choledad privada’ los abordamos desde el humor, el sarcasmo y la franqueza. La idea es que el lector, el cholega, sienta que más que reírse de lo que lee, se dé cuenta que está riéndose de sí mismo, y empecemos a construir una choledad más integradora. Es importante resaltar que el blog es solo una parte de un proyecto más amplio del mismo nombre", dicen en un cuestionario que les fue enviado para este reportaje.
Otro nombre a tener en cuenta en la blogósfera peruana es Roberto Bustamante, quien fue uno de los primeros en identificar la actividad bloguera peruana con el nombre de cholósfera y quien antes ya había planteado un proyecto web llamado Cholonautas.
Bustamante, arqueólogo y antropólogo de la universidad de San Marcos, tiene una visión muy crítica en su blog llamado El Morsa, piensa que en los blogs "hay ciertos temas que pasan demasiado rápido de agenda". "Los blogs parten de la idea de que todo es efímero y coyuntural, lo cual es un punto en contra de los blogs y punto a favor de los medios tradicionales, que por su velocidad las discusiones tienden a durar más", dice para luego agregar que los blogs "van a mutar en algo distinto, se fusionarán con audio y video y otras cosas, se leerán en kindle’s y otros dispositivos personales WiFi. Serán instrumentos de diálogo".
Contrario a los bloggers anteriores, argumentando que el adjetivo de "cholo" es descalificativo para identificar a los peruanos, se encuentra Carlos Quiroz, nacido en Junín hace 30 años, artista con estudios de arquitectura, gestión cultural y literatura, quien desarrolla el blog ‘Peruanista desde Washington’, en Estados Unidos, lugar donde radica. Peruanista es uno de los blogs mejor conectados con el acontecer local realizados desde el exterior.
"Surgió de una necesidad personal. Al salir fuera de Perú, una parte de mí se quedó allá y, como les ocurre a muchos migrantes, yo vivo en dos mundos", dice. "Entonces Peruanista es una forma de conectarme con mi primer país. Los peruanistas eran extranjeros que estudiaban las culturas de Perú, usualmente desde el extranjero, de ahí el nombre de mi blog: escribo acerca del Perú desde afuera, y es una forma de llamar la atención acerca de cosas que creo deberían cambiar o mejorar", agrega.

La traición por entregas (*)

Los artículos de Alan García sobre el perro del hortelano son en verdad un ladrido antinacional. Fueron el preludio de la serie de Decretos Legislativos que El Peruano ha publicado en un libro con prólogo de García que tiene este título: Por un Perú moderno.El volumen debió denominarse Por un Perú vendido. Nuestra denuncia del lunes sobre la venta de Petroperú a una empresa china, venta pactada por García, ha tenido la virtud de encrespar la cólera palaciega. Nuestra fuente fue el importante diario progresista The Independent de Londres. Todo aquel que algo sepa del periodismo mundial coincidirá en que se trata de un cotidiano sumamente serio, muy bien informado, con especialistas de alto nivel en todos los campos. La operación antinacional con Petroperú tiene su base “legal” en el Decreto Legislativo 1031. El artículo 12 del Decreto dice: “Por acuerdo del directorio de FONAFE se determinará las Empresas del Estado que deben inscribir un mínimo de 20% de su capital social en el Registro Público del Mercado de Valores”.Irónicamente, el nombre completo de FONAFE es: Fondo Nacional de Financiamiento de la Actividad Empresarial del Estado. El 1031 busca más bien reducir esa actividad. De acuerdo al texto recién citado, un empresario extranjero –chino o chileno– puede adquirir hasta el cien por ciento de las acciones de empresas estratégicas que ningún país entrega a foráneos.El doctor García es ducho en entreguismo, pero con Petroperú demuestra estar dispuesto a superar todas sus marcas.Con los chinos tiene lazos que no son sin duda sentimentales. Ya en su primer gobierno se produjo un escándalo millonario con medicinas chinas vencidas. En su actual período, lo hemos visto actuar como abogado colérico de la empresa Majaz, transnacional con capitales chinos que no sólo se enfrentó a comunidades piuranas, sino que fomentó juicios, represión, torturas y hasta asesinatos. En el prontuario prochino de García debe figurar también la entrega de Toromocho, una de las mayores minas de cobre del mundo, a Chinalco (debería llamarse Chinasco). Se vendió por una bicoca, según calificó la BBC de Londres. García odia sin medida ni clemencia al pueblo peruano. No es un conservador, es un reaccionario, el reaccionario más vendepatria que haya sufrido el Perú. Por eso escribió en el primer artículo sobre el perro del hortelano: “contra el petróleo han creado la figura del nativo selvático ‘no conectado’, es decir, desconocido pero presumible, por lo que millones de hectáreas no deben ser exploradas”.Allí se anunciaba el afán de entregar los recursos petroleros del país sin medir las consecuencias. Él tenía sin duda otros cálculos. (*) No es que en la repetición esté el gusto, sino que nuestra columna de ayer no pudo circular.

martes, 2 de septiembre de 2008

Tantas veces Cipriani


Nuevamente el obispo Cipriani hizo uso de una misa en la Catedral para hacer declaraciones políticas y llevar agua para su molino, atacando bajamente a los ex integrantes de la Comisión de la Verdad. Inclusive se permitió decir que son demasiado importantes los derechos humanos para estar en manos de un pequeño grupo ideológico, lo que constituye una gran falsedad sobre la CVR.
Como bien ha argumentado monseñor Luis Bambarén, hay aquí un cambio oportunista de posición de alguien a quien los DDHH no le importaron para nada durante el largo periodo de violencia que vivió el país, al punto de calificarlos de cojudez y de haberse callado en latín y todas las lenguas cuando era obispo de Ayacucho y su grey sufría un martirologio interminable por ser pobre, quechuahablante y encontrarse entre dos fuegos.
A nosotros no nos falla la memoria y recordamos bien que en el palacio arzobispal de Ayacucho hizo colocar un cartel que decía: Aquí no se reciben denuncias sobre DDHH; de modo que tenemos todo el derecho de dudar –como monseñor Bambarén, no pocos obispos y sin duda la mayoría del pueblo peruano– de este súbito cambio de quien se sirve del púlpito no para motivos de espiritualidad, sino para hacer política –como la hizo cuando daba conferencias de prensa con el dictador Fujimori– en tanto intenta someter a la iglesia peruana al entrismo sectario del Opus Dei.
De esto último hay suficientes pruebas, y basta leer el aviso publicado en nuestro diario el pasado sábado por comunidades de base de la prelatura de Juli, que dan escandalizada noticia de la expulsión de los padres de la orden de Maryknoll por el obispo español José María Ortega, miembro de la sociedad de la Santa Cruz, afiliada al Opus. El mismo proceder sectario que se ha registrado en otras diócesis del país y que ha dividido al pueblo católico.
Y, desde luego, está el proceso entablado por el arzobispado de Lima contra la Universidad Católica del Perú, en el cual, tras el pretexto de reivindicar una pretendida voluntad testamentaria de José de la Riva Agüero, no logra ocultarse la aviesa intención de tomar el control de dicha casa de estudios para convertirla en centro de penetración ideológica del extremismo fundamentalista de la Obra.
Menos mal, no todos los obispos son del Opus –aunque hay que andarse con cuidado, pues ya son varios– y la mayoría de ellos hacen de los pobres el centro de sus preocupaciones y apostolado. No olvidemos que la Conferencia Episcopal, a través de su presidente monseñor Cabrejos, ha dado su apoyo al informe final de la CVR en su quinto aniversario. Esa es la iglesia que cuenta, la que condena la violencia venga de donde venga, la que acompaña al pueblo de Dios en sus problemas cotidianos. La que acoge la espiritualidad de los humildes y desamparados.